El capital de trabajo es el recurso corriente con el que cuenta una empresa para desarrollar su operación.
De la gestión de este importante indicador depende que una empresa pueda responder por sus obligaciones en el corto plazo.
En este editorial te enseñamos cómo calcularlo e interpretarlo.
En este editorial estudiaremos qué es el capital de trabajo, cuáles son las clases de capital de trabajo, cómo se calculan y cómo deben interpretarse estos indicadores financieros.
Capital de trabajo
“El capital de trabajo es el recurso corriente con el que cuenta una empresa para desarrollar su operación”
El capital de trabajo es el recurso corriente con el que cuenta una empresa para desarrollar su operación, es decir, para comprar sus inventarios, pagar la nómina a los empleados, cubrir las obligaciones financieras y, en general, cumplir con todos los compromisos que tenga en el corto plazo.
Por ese motivo, el capital de trabajo de una empresa es su activo corriente a determinada fecha, en la medida en que estos son los recursos que tiene la empresa para operar y cubrir sus deudas a corto plazo.
Capital de trabajo neto
Ahora bien, al tomar el activo corriente y restarle el pasivo corriente obtenemos el capital de trabajo neto, que puede definirse como el excedente que le queda a la entidad luego de cumplir con todas sus obligaciones a corto plazo.
El capital de trabajo neto es un indicador financiero que puede presentarse de forma negativa o positiva, y muestra la eficiencia con la que opera la administración de la entidad.
¿Cómo se calcula el capital de trabajo neto?
El capital de trabajo neto se puede calcular de forma muy sencilla utilizando el estado de situación financiera, que, como se sabe, es el informe que refleja los activos, pasivos y patrimonio de una empresa a determinada fecha.
Como mencionamos, el capital de trabajo neto es la diferencia entre el activo corriente y el pasivo corriente de la entidad, por lo cual para calcularlo solo se deben restar estas dos partidas, así:
Capital de trabajo neto = activo corriente – pasivo corriente
Los activos corrientes son aquellos que se realizan en un período inferior a 12 meses a partir de la fecha de cierre de los estados financieros, tales como:
Efectivo y equivalentes al efectivo.
Inversiones a corto plazo.
Cuentas por cobrar a corto plazo.
Inventarios.
Los pasivos corrientes son los que son exigibles en un período inferior a 12 meses a partir de la fecha de cierre de los estados financieros, tales como:
Obligaciones financieras a corto plazo.
Obligaciones laborales.
Impuestos por pagar.
Proveedores.
Ejemplo:
En el siguiente cuadro puede observarse cómo se calcula el capital de trabajo neto de una empresa:
| Variable | 2020 | 2019 | Variación |
A | Activo corriente | $250.000.000 | $200.000.000 | $50.000.000 |
B | Pasivo corriente | $225.000.000 | $150.000.000 | $75.000.000 |
C = A / B | Capital neto de trabajo | $25.000.000 | $50.000.000 | -$25.000.000 |
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¿Cómo se interpreta el capital de trabajo?
Cuando una empresa tiene un capital de trabajo positivo, porque su activo corriente es mayor a su pasivo corriente, tiene un colchón de seguridad con el cual responder por sus obligaciones y continuar con su operación.
Cuando una empresa tiene un capital de trabajo de $0 o negativo, porque su activo corriente es igual o inferior a su pasivo corriente, la empresa corre un gran riesgo de tener iliquidez.
Aunque esto no quiere decir que la empresa no pueda operar, sí se debe considerar tomar medidas para mejorar esta situación, tales como revisar las políticas de recaudo de cartera o mejorar su estructura de capital.
¿Por qué aumenta o disminuye el capital de trabajo neto?
El capital de trabajo neto aumenta cuando:
Incrementa las cuentas del patrimonio, tales como utilidad del ejercicio, utilidades acumuladas, prima en colocación de acciones o capital social.
Incrementa el pasivo no corriente, porque esto implica que la empresa está retrasando el pago de sus obligaciones.
Disminuye el activo no corriente.
El capital de trabajo neto disminuye cuando:
Reduce las cuentas del patrimonio.
Reduce el pasivo no corriente.
Aumenta el activo no corriente.
Capital de trabajo operacional
El capital de trabajo operacional es un indicador en el que se consideran únicamente los activos que intervienen en la generación de recursos, tales como los inventarios o las cuentas por cobrar comerciales.
Por esta razón, para calcular este indicador se debe dejar por fuera todas las partidas que no son operacionales, tales como el efectivo y equivalentes y las inversiones a corto plazo, porque se considera que estos no intervienen directamente en el ciclo de actividad de la empresa.
De acuerdo con lo anterior, la fórmula para calcular el capital de trabajo operacional es la siguiente:
Capital de trabajo operacional = activos corrientes – caja e inversiones temporales
Capital de trabajo operacional neto
A partir del capital de trabajo operacional se puede calcular el capital de trabajo operacional neto, así:
Capital de trabajo operacional neto = (activos corrientes – caja e inversiones temporales) – (pasivos corrientes – deuda de corto plazo)
Al calcular el trabajo operacional neto, también se deben dejar por fuera los pasivos corrientes que no sean operacionales, tales como las obligaciones financieras.
De esta forma, el capital de trabajo operacional neto se obtiene a partir de las cuentas que intervienen en la actividad operativa de una empresa (las cuentas por cobrar, los inventarios y las cuentas por pagar), toda vez que se parte de la idea de que la empresa compra a crédito sus inventarios, generando cuentas por pagar a proveedores. Luego, vende sus inventarios a crédito, generando cuentas por cobrar comerciales a sus clientes.
Por ello, si la empresa tiene un capital de trabajo operacional neto muy alto, puede significar que sus activos no están rotando con la suficiente rapidez y que se están acumulando, ocasionando que la empresa no cuente con la suficiente liquidez.
Por el contrario, si el capital de trabajo operacional neto es $0 o negativo, puede significar que la empresa esta recaudando sus activos operativos con mayor rapidez o que está retrasando el pago de sus cuentas por pagar, generando una mayor disponibilidad de liquidez.
Ejemplo:
En el siguiente cuadro puede observarse cómo se calcula el capital de trabajo de una empresa:
| Variable | 2020 | 2019 | Variación |
A | Activos corrientes | $100.000.000 | $80.000.000 | $20.000.000 |
B | Efectivo e inversiones temporales | $40.000.000 | $35.000.000 | $5.000.000 |
C = A – B | Capital de trabajo operacional | $60.000.000 | $45.000.000 | $15.000.000 |
D | Pasivos corrientes | $80.000.000 | $90.000.000 | -10.000.000 |
E | Deuda de corto plazo | $50.000.000 | $35.000.000 | $15.000.000 |
F = D – E | Pasivos corrientes operativos | $30.000.000 | $55.000.000 | -$25.000.000 |
G = C – F | Capital de trabajo operacional neto | $30.000.000 | -$10.000.000 | $40.000.000 |
En este caso, el capital de trabajo operacional neto de la empresa es positivo para el año 2020 y aumentó con respecto al 2019, como consecuencia de que los activos corrientes operativos de la empresa se están acumulando y los pasivos corrientes operativos disminuyeron.
Consejos para mejorar el capital de trabajo operacional
Revisar las políticas de gestión y cobro de la cartera.
Procurar que el plazo de financiación de los proveedores sea superior al que se ofrece a los clientes (por ejemplo, si se vende a crédito a 60 días, el plazo con que se financian los proveedores debería ser mayor). De lo contrario, la empresa tiene que compensar la falta de capital de trabajo con recursos adicionales.
Resumen
Por último, te dejamos la siguiente infografía donde se resumen las clases de capital de trabajo que existen:
Capital de trabajo: definición, clases y forma de calcularlo (actualicese.com)
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